Los directores y gestores de capital humano, destacan la polivalencia y actitud positiva, como elementos diferenciadores de un candidato
El positivismo de recuperación económica que han avalado los mercados mediante una revalorización de la bolsa española, coincide con la euforia de los directores y gestores de recursos humanos de las empresas del país. El 70% afirma que se han frenado los despidos y el 16% afirma que va a contratar en este presente 2017.
Para la contratación, la polivalencia y actitud positiva de los candidatos serán dos elementos diferenciales para tener en cuenta en el momento de la contratación. El factor humano, más allá de la experiencia o los conocimientos técnicos, será otra de las aptitudes que se tendrán en cuenta.
En orden de importancia, la actitud, sin duda, se encuentra en la cima, seguida de la experiencia y la formación. Además, se pueden destacar otros factores a tener en cuenta para la contratación.
- Capacidad de superación. Se han acabado los tiempos en los que se buscan candidatos que “estén de vuelta de todo”. Sea cual sea su experiencia, las empresas quieren profesionales que estén dispuestos a aprender, a seguir superándose a sí mismos y que se atrevan a innovar. Además, llama la atención el hecho de que las empresas dejen de sobrevalorar aspectos como la formación o a la experiencia profesional, para centrarse en el lado más humano de la persona. En este sentido, un 34% considera muy importante que el demandante de empleo realice voluntariado en su vida personal.
- Las actitudes positivas a la hora de relacionarse con los demás y afrontar los conflictos tienen un gran valor añadido porque mejoran la cohesión interna de la organización, así como el clima laboral, y proyectan una buena imagen hacia el exterior.
- En lo que respecta a la actitud personal, las virtudes que más buscan estos directivos en sus futuros empleados es la polivalencia, de forma que sean capaces de realizar distintas tareas y desempeñar varias funciones dentro de la empresa. No se trata de tener conocimientos específicos en muchas áreas, sino tener predisposición a realizar funciones diferentes a las determinadas para el puesto, de adaptarse a las necesidades y “estar abierto” a aprender.
- Motivación. Es un aspecto esencial. Los candidatos que se muestren ilusionados con el puesto darán lo mejor de sí mismos y las empresas son conscientes de ello.
- Iniciativa. Se traduce en la capacidad del candidato para proponer, implementar mejoras o idear nuevos proyectos.